Siguiendo con la «ley de transparencia» de Apple con respecto al rendimiento de iOS (sobre todo), posiblemente haya optado por notificar si el rendimiento de nuestro dispositivo se vería afectado con cada nueva actualización.
Tras el revuelo que se provocó el año pasado con la actualización de iOS 10.2 y en iOS 11.2 debido a que Apple reconoció que ralentizaba intencionadamente los iPhone más antiguos para cuidar los componentes de los dispositivos (afectaba a los iPhone 6, 6S, y SE que tuvieran una batería con baja capacidad de carga para evitar que se apagaran inesperadamente), ha decidido que en breve notificará si nuestro móvil podría verse afectado con las nuevas actualizaciones.
Aquella medida, lo que hacía era bajar la frecuencia de la CPU con lo que el rendimiento bajaba. Debido a la nube de críticas recibidas, Apple lanzó durante todo 2018 una campaña de reemplazo de baterías de iPhone por 29€. El final de la campaña mostró unos datos increíbles: 11 millones de iPhone pasaron por el Apple Genius para que fuera sustituida la batería.
Al poco, tuvo que lanzar iOS 11.3 con la nueva opción en iOS de «Salud de la batería«, donde podemos ver cuál es la máxima capacidad de carga de nuestro iPhone, iPod y iPad.
El gobierno del Reino Unido anunció en su web que Apple acordó formalmente notificar mejor a los clientes cuando una actualización de iOS podría afectar el rendimiento del iPhone:
Para garantizar el cumplimiento de la ley del consumidor, Apple acordó formalmente mejorar la información que brinda a las personas sobre el estado de la batería de sus teléfonos y el impacto que el software de gestión de rendimiento puede tener en sus teléfonos», dijo el gobierno del Reino Unido en su sitio web.
La investigación de CMA se centró en las preocupaciones de que no se advirtiera a las personas que el rendimiento de su teléfono podría disminuir después de una actualización de software para administrar las demandas de energía de las baterías.
Quizás, con esta medida nos encontremos en la misma situación que macOS donde los equipos más antiguos no tienen las últimas actualizaciones pero sí lanzan parches de seguridad o pequeñas actualizaciones para Safari.