Algunos propietarios del Apple Watch, están encontrando en la bandeja de entrada de su email, una invitación de Apple que les incita a inscribirse en un estudio del corazón de la compañía, en colaboración con el centro de Medicina de Stanford.
La compañía quiere captar nuevos miembros, para realizar un estudio más amplio y real contando con todo tipo de personas.
Los participantes deben descargarse la aplicación de Apple Heart Study en sus iPhone, la cual también se mostrará en el Apple Watch.
El Apple Watch sigue enfocándose en la salud
Una vez que la persona se inscribe y es aceptada, la aplicación Apple Heart Study controla el ritmo cardíaco y posibles anomalías.
Cuando la aplicación detecta un ritmo irregular, manda una notificación al usuario, y organiza una videollamada gratuita con un médico.
En algunos casos, el médico enviará al paciente todo lo necesario, para realizar un electrocardiograma para confirmar los problemas detectados por el Apple Watch.
Los participantes del estudio deben ser residentes de los Estados Unidos, y tener 22 años o más. También deben disponer de un Apple Watch Series 1, 2, o 3, con la última versión del sistema operativo WatchOS. El único reloj que se queda fuera, es el “Serie 0”.
Aunque la compañía californiana en un principio enfocó el Apple Watch en un artículo de lujo, y un complemento de moda más, ahora se están enfocando con mucho ahínco, en convertir el reloj en un accesorio de salud y forma física, y lo están consiguiendo.
Ya vemos como algunos modelos del Apple Watch cuentan con GPS, son impermeables, y compatibles con algunas máquinas de cardio del gimnasio, las cuales detectan la frecuencia cardiaca mientras realizamos ejercicio.
Y también, hemos visto como el Apple Watch en algunos casos, ha sido la herramienta necesaria para salvar una vida que estaba en grave peligro, ya que puede alertar a la persona de un ritmo cardiaco anómalo, o llamar a los servicios de emergencia y proporcionarles nuestra posición exacta.