Los iPhone 7, los nuevos iPhone 7s 8 y el esperado iPhone X, guardan todas las imágenes en el nuevo formato HEIF (alta eficiencia de formato) que Apple está adoptando.
Por ello todas las nuevas fotografías o videos que realicemos con nuestros iPhone, se guardarán en los nuevos formatos HEIF para fotografías y HVEC para videos.
Estos nuevos formatos quieren establecerse en todo el mundo, como VHS lo hizo sobre Betamax.
Este formato guarda las imágenes mucho más comprimidas que el formato JPEG, manteniendo la misma calidad y superándola en muchos casos.
Esto significa que puedes almacenar el doble de fotos en tu iPhone antes de llenarlo o, visto de otro modo, puedes mantener todas las fotos que ya tienes, pero ganando una gran cantidad de GB de almacenamiento.
La compresión de imágenes ha mejorado mucho, algo lógico cuando vemos que el formato JPEG nació en 1992.
Los nuevos ordenadores de los que disponemos hoy en día, pueden comprimir un archivo de forma casi instantánea, y además pueden codificar y decodificar los archivos rápidamente sin hacer que el sistema se ralentice o la batería sufra.
Estas son las ventajas de HEIF
HEIF ofrece otras ventajas sobre JPEG. Para empezar, no es tanto un formato de archivo como un contenedor de archivos. Un archivo JPEG es una imagen única, sin embargo, HEIF puede ser una sola imagen o una secuencia de imágenes.
Una imagen HEIF se puede girar y recortar sin ser alterada, por lo que hace que cualquier edición sea reversible.
La compatibilidad con el resto del mundo aún no ha llegado, por lo que Apple ha decidido convertir nuestra imagen HEIF en JPEG cuando las exportamos, para que no tengamos ningún tipo de incompatibilidad.
Si quieres saber más sobre este tipo de formato, o los beneficios que este aporta. Te recomiendo leer un artículo en ingles de Kelly Thompson, donde además realiza comparaciones reales entre los dos tipos de archivo.